Conociendo la obra de Marcelo E. Irazábal

Marcelo E. Irazábal es un profesional con una extensa trayectoria en arquitectura y construcción, campos en los que ha trabajado durante más de cuatro décadas. Desde hace cinco años, ha canalizado su interés por el arte visual a través de una producción centrada en el estudio del color, la geometría sagrada, los símbolos y los enigmas del universo.

Su obra plástica se apoya en el uso de herramientas técnicas del dibujo arquitectónico, aplicadas al desarrollo de composiciones abstractas con fuerte impronta geométrica y simbólica. Entre sus principales líneas de trabajo se encuentra la exploración de la geometría sagrada, plasmada en composiciones que integran patrones como la Flor de la Vida, el Cubo de Metatrón o el Árbol de la Vida. Estas piezas combinan formas limpias con colores vibrantes, buscando transmitir conceptos relacionados con el equilibrio, la unidad y la conexión entre lo humano y lo trascendente.

Otra vertiente de su producción gira en torno al diseño de sigilos: construcciones gráficas realizadas a partir de frases con intención concreta, en las que se integran símbolos y estructuras tipográficas. Estas obras operan como dispositivos visuales de carácter introspectivo, vinculando la expresión artística con dimensiones rituales o energéticas.

La utilización de materiales reciclables y de diversas texturas complementa su búsqueda estética, agregando a las composiciones una dimensión táctil y ecológica. Su trabajo se ubica en la confluencia entre ciencia, arte y espiritualidad, y propone una experiencia visual cargada de significados simbólicos y personales.