PREMIO TURNER 2022

Desde el 20 de octubre y hasta el 19 de marzo de 2023, van a estar expuestos los finalistas del Premio Turner 2022 en la Tate Liverpool.

El 12 de abril pasado la Tate Liverpool anunciaba los nombres de los cuatro finalistas. 

*Heather Phillipson (Londres,1978):  es una de las grandes promesas  del arte del Reino Unido.

Es la menor de tres hermanos. Su madre era trabajadora social y activista feminista y su padre profesor, artista, músico de jazz y escritor.

Phillipson se expresa con distintos elementos, medios y gestos que la artista designa como “experimentos de pensamiento cuántico”.

Trabaja con una variedad de medios como video, escultura, música, instalaciones a gran escala, textos y dibujos.

La artista es también una aclamada poetisa .

Sus eventos en vivo, incluyen música, video, objetos y discursos.

Ha expuesto en distintos prestigiosos lugares nacionales es internacionales, como la Serpentine Gallery, la Tate Britain, la Whitechapel Gallery y el Instituto de Arte Contemporáneo de Londres, así como en el Palais de Tokyo en París, llegando hasta la Bienal de Arte de São Paulo.

Desde 2016, se desempeña en forma voluntaria como mentora en Arts Emergency, una organización benéfica con sede en el Reino Unido que trabaja para aumentar el acceso a las artes para jóvenes de 16 a 19 años de entornos desfavorecidos.

Fue nominada por su exposición individual “Rupture No 1: blowtorching the bitten peach”, que expuso en la Tate Britain de Londres, y por “The End” (2017), su propuesta para The Fourth Plinth, el pedestal situado en la esquina Noroeste de Trafalgar Square en Londres, donde a partir de 1998, se coloca una escultura diferente cada año.

*Ingrid Pollard (Georgetown – Guyana, 1953): vive y trabaja en Londres desde que tenía cuatro años cuando su familia se mudó al Reino Unido donde ya vivía su padre.

Comenzó a hacer fotografías haciendo uso de la cámara de su progenitor.

Desde joven, Pollard se interesó en los movimientos de liberación en torno a la raza, el género y la sexualidad.

Trabaja principalmente con fotografía y escultura, pero a veces recurre también a la imagen en movimiento. En sus obras utiliza fotografías de retratos e imágenes de paisajes tradicionales para explorar construcciones sociales como el carácter británico o la diferencia racial.

Su obra de carácter multidisciplinar cuestiona la relación del ser humano con el mundo natural haciendo hincapié en preguntas referentes a lo que implica ser británico, la raza y la sexualidad.

Actualmente se desempeña como profesora de fotografía en la Universidad de Kingston.

Pollard es una figura clave en el movimiento de arte británico negro de la década de 1980 y es un miembro activo de las campañas de base por la liberación de las mujeres y los derechos LGBTQ.

La artista ha estado realizando trabajos experimentales que exploran temas como la raza, la sexualidad y la identidad durante más de 40 años.

Fue seleccionada por su exposición individual “Carbon Slowly Turning” (2021), en la Galería MK en Milton Keynes. 

El jurado destacó su capacidad de  “arrojar luz sobre hechos e historias ocultas a simple vista”.

*Veronica Ryan (Plymouth, Monserrat, 1956): es una escultora británica nacida en la capital de Montserrat, isla en las Antillas Menores en India, pertenecientes al Reino Unido. Se mudó a Londres con sus padres cuando era una niña y ahora vive entre Nueva York y Bristol.

Ryan se manifiesta a través de instalaciones y objetos escultóricos para lo cual hace uso de combinaciones de formas naturales y materiales manufacturados.

Con sus trabajos pretende reflexionar sobre los conceptos de desplazamiento, fragmentación y alienación. 

Creció y se formó en Gran Bretaña y en 2021 fue nombrada OBE, Excelentísima Orden del Imperio Británico por los servicios prestados al arte.

Entre sus primeras influencias se encuentra la escultora Eva Hesse, Louise Bourgeois, Alice Aycock y Barbara Hepworth. 

Ryan recibió una beca de viaje de Boise de Slade lo que le permitió viajar a Nigeria, donde se interesó por la readaptación de consumibles cotidianos, incluidos alimentos y materiales de desecho efímeros, en fetiches utilizados en ofrendas espirituales y santuarios. Ese viaje la inspiró a continuar sus estudios con una maestría en historia del arte en SOAS (Escuela de Estudios Orientales y Africanos) fundada en Londres en 1916.

Ha sido elogiada por su interés por la ecología, la historia y la dislocación, así como por el impacto psicológico causado a partir de la pandemia.

Fue nominada por su exposición individual “Along a Spectrum” en la galería Spike Island de Bristol y por el trabajo realizado para la Hackney Windrush Art Commission en Londres. 

*Sin Wai Kin ( Toronto, 1991): también es conocida a través de su personaje Victoria Kin.

En 2009 se mudó a Londres donde  se involucró con el escena creativa queer experimentando con el drag, a la vez que se fue dando cuenta de que no era binaria.

En 2017 obtuvo una maestría en impresión en el Royal College of Arts.

Sin Wai Kin se destaca con sus performances centradas en la práctica del disfraz, que utiliza para “alterar los procesos normativos del deseo, la identificación y la objetivación”, subvirtiendo referencias pop y populares, desde Jessica Rabbit hasta Marilyn Monroe.

Con su práctica del drag , la artista desestabiliza las nociones esencialistas y binarias de género al enfatizar su naturaleza performativa.

Asimismo según sus propias palabras, su práctica del drag es un mecanismo para «permitir y ocupar espacios predominantemente masculinos y blancos».

A través de su práctica, Sin Wai Kin critíca la representación de la feminidad, los estándares de belleza occidentales y la «identificación con imágenes de género y la forma en que invierte los cuerpos».

El Turner destaca que esta artista da vida a la fantasía a través de la narración de historias en sus performances, videos, escritura e impresión.

El jurado destacó también su película Dream of Wholeness in Parts (2021), en la que Sin Wai Kin hibrida, a través de la estética drag, la filosofía tradicional china con la música y la poesía contemporáneas.

El Premio Turner es el concurso de arte más importante del Reino Unido, lo que hoy día y en función de la firmeza de Londres en el ámbito internacional de arte, se ha convertido en el premio mas importante del mundo del arte contemporáneo, aunque no todos los ingleses lo aceptan.

Cada país, tiene sus particularidades contradictorias y Reino Unido no zafa de ellas.

Un grupo de países tan marcados por la severidad controladora de la mano de la familia real, específicamente del actual rey  Carlos III, quien siempre ha pretendido ser el árbitro en materia de selección y aprobación del arte.

El Turner nació de nalga y con forsep. 

Fue creado para dar cabida al arte conceptual dentro del ámbito tan pactando y restringido inglés, algo por cierto muy en contra de la postura del artista William Turner quien había expresado su voluntad de donar dinero a la Royal Academy de Londres, junto con una medalla acuñada por el mismo a premiados artistas.

Fue llamado así en honor al pintor J.M.W. Turner, si se quiere uno de los pocos artistas ingleses que trascendió el ámbito nacional y de la cual los británicos se han aferrado tanto, amén del desplazamiento que le infirieron los impresionistas franceses, siempre en pugna por lograr la mayor trascendencia territorial.

Generalmente la selección de los artistas proveniente de diferentes medios artísticos, así como sus exposiciones, son motivo de controvertidas notas de la prensa especializada a la vez que fuente de grandes apuestas que los ingleses utilizan para llevar a cabo esa faceta que forma parte de su idiosincracia.

Lo organiza la Galería Tate de Londres, y desde sus inicios en 1984 a instancias del grupo llamado Patronos del Nuevo Arte  (PNA) quienes asesoraron al historiador de arte y crítico Sir Alan Bowness (Londres, 1921-2021), se ha convertido en el premio artístico más reconocido y prestigioso del Reino Unido.

Bowness fue director de la Tate Gallery y promovió la creación de las sedes de Liverpool (1988) y de ST Ives (1993).

Luego de abandonar su cargo de director, lo sucedió Sir Nicholas Serota (Londres, 1946), el todo poderoso amo del arte ingles, artífice principal, quien siendo director de la prestigiosa Whitechapel, comenzó a traer artistas conceptuales fundamentalmente de Alemania, país que continuaba siendo castigado por el mundo entero por su postura nazista durante la IIGM.

Fue Serota quien decidió que el Premio Turner debía de ser el equivalente mas cercano en literatura al Booker Prize y marcó el nuevo rumbo del certámen.

El Premio Turner  se celebra en forma anual y hasta hace pocos años, solo podían participar artistas de origen británico menores de 50 años. 

Pero desde 2016 las bases han cambiado y los artistas no tienen límite de edad y pueden ser extranjeros trabajando en Reino Unido o ingleses que vivan en el exterior.

Para esta edición post pandemia la cual fue catalogada como “emocionante, rica y variada”, el jurado muy variopinto por cierto, ha viajado por todo Reino Unido buscando participantes.

Los miembros del jurado van cambiando edición tras otra y siempre tiene que haber un extranjero. 

Este año está integrado por *Irene Aristzábal (Jefe de Curaduria y Practica Pública del Centro de Arte Contemporáneo Baltic – Gateshead, Inglaterra), *Christine Eyen (investigadora de la School of Arts and Media, University of Central Lanchashire), *Robert Leckie (director de cine) y *Anthony Spira (director de la MK Gallery, Milton Keynes).

A su vez el jurado esta copresidido por *Alex Farquharson (Director de Tate Britian) y *Helen Legg (Directora de Tate Liverpool)

En esta edición el Premio Turner ha regresado a Liverpool luego de 15 años que no se exponía allí, primera instancia en que fuera presentado fuera de Londres. 

A partir de 2007 han ido variando las ciudades de presentación incluyendo Newcastle, Hull y Margate.

El ganador recibirá una suma de entre 25 y 40 mil libras, cifra variante según las fuentes, y los finalistas entre 5 y 10 mil libras.

Pero eso es solo el punta pie de una gran carrera que les espera de aquí en mas. Los seleccionados logran una gran notoriedad en todo el Reino Unido con trascendencia internacional en forma inmediata, y automáticamente sus obras trepan precios exorbitantes convirtiéndolos en artistas ricos.

Entre los mas reconocidos ganadores podemos citar a Gilbert & George (1986) – Tony Cragg (1988) – Richard Long (1989) –  Anish Kapoor (1991) – Anthony Gormley (1994) – Damien Hirst (1995) – Douglas Gordon (1996), Chris Ofili (1998) – Steve McQueen (1999) – Martin Creed (2001), sin dejar de mencionar la fabulosa carrera que logró Tracy Emin quien fuera finalista en la edición de 1999.

Habrá que estar atentos a la publicación que hará la BBC el próximo diciembre.

La entrega de los premios tampoco está exenta de excentricidades donde se escogen destacadas celebridades para homenajear a los ganadores. En otras ocaciones ha sido Madonna y Yoko Ono las responsables de ello, entre otros de notoriedad popular.