Visitando Talleres MARTÍN LORENZO

Martín Lorenzo (MADE), es un joven artista nacido en Montevideo en 1990 que actualmente reside en Maldonado.

Ha participado en varias muestras colectivas de las que recuerdo la que realizó junto con el colectivo ”Kiosko” ( Santiago Velazco, Fabio Rodríguez y Carolina Curbelo) en el Centro Cultural de España, otra llevada a cabo en La Madriguera Café, así como también en Pera de Goma, dirigido por Fernando Corbo, donde sus obras en “Episodio 5”, aun las recuerdo por su efectividad lumínica y artística, destacándose por encima de otras.

Y es justamente allí, en ese aspecto de la efectividad, donde radica el poder seductor de sus obras las cuales provienen del ámbito de la publicidad.

MADE logra con muy pocos recursos y con solo unos trazos, transmitir con eficacia una obra que se apodera del espectador, llevándolo a planos donde la mente y su creatividad, también deben de formar parte del contexto creativo.

MADE no es un chico que se ría mucho, sin embargo su obra está impregnada de un gran carga de ironía así como de humor, dependiendo de como se la enfoque.

Sus obras que mas se destacan son aquellas que tienen el concepto de la publicidad implícita, como por ejemplo un coche policial del servicio 911 con llamas de fuego que emanan de una manera muy prolija, o por ejemplo un retrato que hizo de otro colega con forma de excremento que hizo sin levantar el pincel.

Hice foco en una serie muy colorida, donde MADE recrea a partir de elementos básicos, como una casa, su gata, el sexo y otros componentes que conviven en su vida cotidiana, y que dan cuenta de la gran resolución visual y efectiva que maneja a la hora de comunicar.

MADE es un ex adicto a la droga, instancias que le llevaron a un mal andar producto de problemas familiares que se le han hecho difícil superar, pero desde hace unos años y con ayuda profesional, lo viene venciendo.

Esa particularidad en su vida, obviamente que incide en sus obras, lo que lo llevan a instancias de oscuridad en que libera su furia y en poco rato crea una serie de pinturas que exterioriza, como es el caso de sus diabólicos.

Pero tiene otras instancias donde con la brillante creatividad que lo caracteriza, toma elementos cotidianos para dar visibilidad a su vida.

Partiendo de la caja de antidepresivos que debe de tomar a diario, ha creado una serie de pinturas inspirado en la caja de Alplacin, que ha titulado con gran acierto y sin carecer de su humor, “Cajita feliz”.

También hace de dichos comprimidos un elemento que adhiere y forma parte de su discurso artístico.

De esa forma, y a través de pinceladas con acrílico, tergiversa la caja de los medicamentos creando una especie de bandera, lo que lo acercan a la que fuera las pinturas de Mark Rothko, quien también utilizaba la pintura para calmar sus estado depresivos.

Aunque Rothko trabajaba con la profundidad llevando al espectador a transitar en otras dimensiones, MADE lo hace de forma mas esquemática y básica, acercándose a lo que fuera el Pop Art americano, donde se hace foco mas a lo externo y visual a que la interioridad de la obra.

Este aspecto de referencia a otros artistas se ve en varias de sus obras, lo que denota su conocimiento de la historia del arte a la hora de plasmar sus pinturas.

Claramente Andy Warhol habita en sus pinturas con referencias evidentes como la lata de Royal, pero MADE también hace otras guiñadas mas sutiles a otros artistas.

A través de un florero totalmente negro con forma de féretro con una flor que está cayendo, llamado “Flore muerta”, del 2022, nos lleva a tener presente a los girasoles de Van Gogh que no eran otra cosa que autorretratos del artista.

Pero un elemento básico a la hora de valorar la obra de un artista es la veracidad y honestidad con la cual se vincula con el espectador, y este aspecto claramente se ve en la obra de MADE donde existe una clara relación de consecuencia entre su vida y sus obras.

No hay duda de que se trata de un gran artista con dotes para el éxito.

Actualmente está manejando opciones de realizar una residencia en New York donde fue aceptado por una institución. Vaya donde vaya es de desear que logre el éxito merecido.